Después de dos intentos fallidos el sábado, una empresa aeroespacial con sede en California decidió posponer el lanzamiento del primer cohete impreso en 3D del mundo.

El propulsor Terran 1 de Relativity Space estaba programado para despegar a las 4 p.m. ET desde la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida, pero cuando quedaban 45 segundos en la cuenta regresiva, los controladores terrestres cancelaron el intento. Aproximadamente una hora antes, el cohete sufrió un apagado de último minuto por separado después de que se dispararon los motores de refuerzo.

No está claro qué causó que los controladores de lanzamiento de Relativity se retiraran, y la compañía aún tiene que anunciar una nueva fecha y hora de lanzamiento.

«Según la revisión inicial de los datos, el vehículo está en buen estado. Más información a seguir sobre la causa de los abortos hoy. Gracias por jugar», dijo la compañía. dijo en una actualización de Twitter.

El primer intento de despegue de la compañía el miércoles fue cancelado luego de que se detectara un problema de temperatura del propulsor en la segunda etapa del cohete. Relativity no dijo si los abortos del sábado estaban relacionados con el mismo problema.

El vuelo de prueba de Terran 1 representa un hito importante para Relativity Space y, si tiene éxito, sería un hito para la industria de la tecnología espacial. La compañía dijo que la impresión 3D podría abaratar la construcción de cohetes y la fabricación de cápsulas espaciales y otros componentes para misiones a la Luna y Marte.

Los cohetes con partes impresas en 3D han volado al espacio antes, pero el propulsor de Relativity es el primero en fabricarse casi en su totalidad con impresión 3D.

Aproximadamente el 85% de la masa del cohete, incluidos sus nueve motores, se imprimió en 3D, según la compañía. Relativity dijo que apunta a que los lanzamientos futuros sean 95% impresos en 3D y totalmente reutilizables.

Relativity Space se fundó en 2015 y tiene su sede en Long Beach, California. El cohete Terran 1 está diseñado para llevar hasta 2756 libras a la órbita terrestre baja. Los funcionarios de la compañía dijeron que sus propulsores impresos en 3D proporcionarían una opción relativamente económica para lanzar pequeños satélites comerciales al espacio.